Ya, ¿me echaron mucho de menos?
Pasa que la semana pasada estuve muy ocupado (aparte de poco ocurrente), por lo que tuve que dejarlos sin post. Pero no desesperen que ya estoy de vuelta, creo. Esta vez con algo de utilidad pública no necesariamente para los raros del japonés.
Contar las palabras y caracteres de distintos tipos de archivo es fundamental para el traductor, puesto que serán la base de lo que va a cobrar y lo que va a tardar. Entonces, para que no nos quedemos cortos (ni largos), veamos algunas formas de contar palabras con mayor o menor precisión. Ahora, si el cliente nos sale por teléfono con que «son solamente como 2 páginas», hay que sospechar. Casi seguro que serán muchos miles de palabras y si cotizamos «dos paginitas», estaremos fritos (por lo demás, tampoco es recomendable cotizar sin ver al menos una muestra del texto).
Entonces, ¿cómo contamos las palabras o caracteres?
1. Para documentos en Word:
Es lo más sencillo, porque basta con usar la función incorporada. Pero hay que tener ojo de todas formas:
Si la versión de Word es anterior a 2007, las notas al pie, los cuadros de texto y similares serán olímpicamente ignorados. Lo que puede ser fatal a la hora de cotizar. Afortunadamente, eso ya no pasa desde Word 2007 (¿quién dijo que era malo?). Pero hay que acordarse de marcar la casilla final para que los incluya.
Lo bueno es que al diferenciar entre caracteres asiáticos y occidentales, podemos hacer una cotización más exacta. Si un texto japonés, que cobraremos por caracter tiene muchas palabras en romaji, al contarlas por carácter podríamos estar estafando al cliente sin querer. Por ejemplo, el documento de la foto tiene 30 «palabras», combinando caracteres japoneses y palabras españolas, pero 108 caracteres en total.
Si tenemos Word 2003, no le creemos a Microsoft o necesitamos una estadística más detallada, podemos usar la herramienta «Complete Wordcount» eso sí una vez que la actualicen, porque está en proceso de renovación. (Gratis… al menos hasta hace un tiempo).
Otra opción puede ser +Tools, un complemento gratuito para Wordfast. Tiene la ventaja de que permite un conteo en varios archivos a la vez y genera un informe con la estadística total e individual de los archivos:
La desventaja es que no diferencia entre los tipos de caracteres japoneses y occidentales, pero bueno, eso nos importa solo a unos pocos. Y si estamos en serio, podemos usar la función de estadísticas de MemoQ, que sí la hace, y aparte, nos muestra la cantidad de segmentos, porcentaje de coincidencias con nuestras memorias, etc. todo lo cual nos servirá a la hora de ponderar la carga de trabajo necesaria.
Ahora bien, si usamos todos los métodos antes mencionados en un mismo documento, veremos que suele haber disparidad en los resultados, con MemoQ siendo por lo general el más generoso en los conteos (los ejemplos de las fotos son aleatorios, no es tanta la diferencia, no se me asusten). Eso se debe a que los criterios para considerar qué es una palabra difieren según la herramienta. Para algunas, John’s puede ser sólo 1 palabra y para otros, dos. Por lo tanto, lo importante es ponerse de acuerdo con el cliente en el conteo.
Otro día vemos qué hacer para otros formatos.